domingo, 31 de enero de 2010

Artículo de Manuel Vicent en el País

El Cabanyal, naufragio de cemento
MANUEL VICENT 31/01/2010



La memoria literaria de Blasco Ibáñez, el ambiente de artistas y pescadores, las casas solariegas� Todo será destruido si la avenida planeada por el Ayuntamiento de Valencia arrasa el barrio.
En la franja del litoral entre el Grao de Valencia y la Malvarrosa tienen asiento varios poblados marineros divididos desde el siglo XIX por las acequias del Turia, que vertían las aguas en el mar. La acequia del Riuet marcaba la frontera del Grao con el Canyamelar; la acequia de En Gasch separaba el Canyamelar del Cabanyal; la acequia de Los Ángeles o de Pixavaques limitaba el Cabanyal de la Malvarrosa, que entonces se llamaba Cap de França, la cual a su vez tenía en la acequia de La Cadena la última marca de las playas de la ciudad de Valencia. De estos poblados, el del Cabanyal era el que poseía el alma más fuerte, más marinera, puesto que constituía el centro de todo el ajetreo de la pesca. En su playa varaban en aquel tiempo, junto a Flor de Mayo, la barca que dio nombre a la primera novela de Blasco Ibáñez, otras cincuenta embarcaciones de cubierta, de entre 15 y 25 toneladas, que faenaban día y noche en aguas del golfo. La idílica escena de los bueyes rubios tirando de ellas en medio de las olas para arrastrarla hacia la arena o botarlas en el agua ha servido de motivo para muchos cuadros de Sorolla y de José Navarro, si bien por debajo de esa luz cegadora y aparente felicidad preternatural alentaban las pasiones y la miseria de los hombres de mar y de aquellas mujeres que esperaban en la orilla con un cesto en la cadera la llegada del pescado.
Si el Ayuntamiento fuera una empresa realmente ciudadana, estos poblados marineros serían respetados
El español, conservador y retrógrado en ideas políticas y religiosas, es pródigo a la hora de destruir el patrimonio
Aunque parezca una batalla perdida, sus vecinos están también ahora dispuestos a batirse hasta el final
La novela �Flor de Mayo�, publicada por Blasco Ibáñez en 1895, es un drama borrascoso que narra la vida maldita de aquellos pescadores, pero ese relato de celos, venganzas y naufragios, leído hoy, no es nada si se compara con la nueva borrasca de cemento, ladrillo y especulación que están ahora soportando los habitantes del Cabanyal y que les llega directamente por decreto desde el Ayuntamiento de Valencia mediante una avenida abierta con la piqueta, que paradójicamente lleva el nombre del autor de la famosa novela y que pretende partir en dos el alma marinera del barrio y su recuerdo histórico imborrable.
A finales del siglo XIX, este poblado marinero estaba unido a las colonias veraniegas que los burgueses de Valencia habían establecido en la playa, y en ellas los personajes de Arroz y tartana, menestrales felices del entorno del mercado central y los de Flor de Mayo, pescadores llenos de pasiones elementales, convivían durante unos meses al año en un conglomerado donde se mezclaban casas de estilo colonial y modernista con miserables barracones. Aquel entramado de pescadores, marineros y burgueses de la capital proporcionó mucha materia a Escalante para sus sainetes valencianos y a Blasco Ibáñez para su drama naturalista, al estilo de su maestro Zola.
Hay que imaginar cómo sería la vida del Cabanyal en aquel tiempo. Al atardecer, antes de que se encendieran los faroles de gas, sonaban las fichas de dominó en los cafés; tal vez había una representación en el teatro de la Marina o se oía la pianola de un baile que se celebraba en alguna villa mesocrática con fachada de azulejos y mirador historiado; los veraneantes hacían tertulias en las puertas de casa tomando el fresco y por la calle de la Reina, la principal de la barriada, se paseaba con chaqueta de pijama a rayas Blasco Ibáñez, que entonces aún vivía en la alquería de San Juan, antes de construirse la mansión en la Malvarrosa, con cariátides en la terraza. El escritor conocía a fondo aquel mundo, pero además de extraer de él personajes de ficción, también era un agitador político y se movía por el casino republicano del Cabanyal levantando pasiones populistas contra la monarquía, el clero y el militarismo.
Casas de pescadores, balnearios de Las Arenas, termas Victoria, donde se establecieron después los salones de baile Casablanca; los establos de la casa de los bueyes de tiro de las barcas; barriadas de veraneantes burgueses, con casas art déco; el sanatorio de San Juan de Dios, que recogía a los niños lisiados pintados por Sorolla; merenderos de la explanada de Neptuno, y casetas de baños se alternaban en la playa desde el Grao hasta la Malvarrosa, que debía el nombre a la fábrica de esencias para perfumistas extraídas de las malvas rosáceas, propiedad del francés Robillard.
Estamos en lo de siempre, si el Ayuntamiento de Valencia, en lugar de ser una empresa constructora al servicio de la codicia de los tiburones, hubiera sido una empresa realmente ciudadana estos poblados marineros habrían sido cuidados, respetados, restaurados y asumidos desde el principio como un verdadero tesoro urbano; si la ciudad se hubiera extendido de forma orgánica, como lo ha hecho, por ejemplo, Londres, habría asimilado los pueblos huertanos de alrededor respetando su alma, sin destruirlos ni aniquilarlos con autovías, avenidas impersonales y edificios vulgares como pretende hacerlo ahora con el Cabanyal. Pero este barrio tiene una personalidad muy fuerte, un alma muy definida, hecha a una lucha antigua contra los embates y las zozobras del mar. Aunque parezca una batalla perdida, sus vecinos están dispuestos también ahora a batirse hasta el final contra la otra amenaza de naufragio, que le viene esta vez desde el centro de la ciudad.
No se trata de literatura ni de nostalgias. El aura más intensa de una ciudad, que envuelve sus calles, plazoletas, tiendas, cafés, teatros y pequeños jardines, la crean los artistas y los literatos que por allí han pasado, no los políticos y menos aún las inmobiliarias. En este sentido, el Cabanyal ha dado lo mejor a Valencia. Allí alienta el espíritu de Blasco Ibáñez, de Sorolla, de Benlliure, de José Navarro, de Mongrell, de Agustí Centelles, de Cecilio Pla. Su memoria es la que va a ser destruida para siempre cuando esta avenida llegue al mar. La historia se habrá acabado y una vez más se habrá repetido la vieja maldición, aplicable al resto de España. Éste es un pueblo conservador y retrógrado en ideas políticas y religiosas, pero absolutamente pródigo a la hora de destruir el patrimonio que merece ser conservado. Se sigue rezando novenas a san Cucufate y se tiran a la basura los azulejos de una cocina del siglo XVII para sustituirlos por un zócalo de plástico; un cura tridentino entrega a un chamarilero una talla románica a cambio de que le arregle una gotera en la abadía; un ayuntamiento de derechas destroza pueblos llenos de casas solariegas, casinos de labradores y jardincillos con templetes de música, que son símbolos de su ideología, para convertirlos en ciudades dormitorios de ladrillo visto; se cambian a pelo artesonados con vigas de madera noble del siglo XV por cubiertas imitando a mármol.
El Cabanyal ha sido declarado conjunto histórico protegido, patrimonio de interés cultural. Para destruirlo, el Ayuntamiento ha tramado un plan muy estudiado. Primero lo dejó abandonado a su aire; luego propició que lo ocuparan tribus marginales; compró viviendas a medida que las hacía inhabitables; las llenó de ratas y, finalmente, ha tentado con el señuelo de la revalorización a sus habitantes más débiles o desmoralizados mientras las palas y las hormigoneras avanzaban hacia el mar como si las guiara una fuerza lógica, moderna e imparable, cuando sólo se trata de codicia unida al mal gusto que es la gracia urbanística, herencia del franquismo. Un hotel de lujo hortera devoró el espíritu del balneario de Las Arenas; los chalés en ruinas de la calle de Eugenia Vives pronto serán sustituidos por una fachada impersonal de muchas alturas y así sucesivamente va a caer bajo la piqueta un barrio que pudo haber sido un modelo de amor a la historia por parte de ediles cultos y conscientes de que la ciudad es una empresa de los ciudadanos y no de los especuladores. La plataforma creada para salvar el Cabanyal tiene todavía años de lucha legal por delante. Se trata de que esta vez no vuelva a naufragar la barca Flor de Mayo.

jueves, 28 de enero de 2010

CINE FÓRUM ENERO 2010


Como en el taller de lectura hemos leido el libro " El Lector" nos parece que podemos ver ahora la película del mismo título y establecer comparaciones.
Esperamos que sea del agrado de todas las espectadoras y espectadores y que cada vez seamos un colectivo mas grande, para disfrutar otra manera de ver cine.

Dones Progresistes.

jueves, 21 de enero de 2010

Totalmente de acuerdo


Una verdad que no admite dudas.
Trini.

martes, 19 de enero de 2010

Taller de lectura
EL LECTOR


I ) EL AUTOR Y SU OBRA:

BERNHARD SCHINK: ( 6 de julio de 1944, Bielefeld, Alemania) es un escritor y jurista alemán. En 1998 fue nombrado juez en la corte constitucional del estado federal de Renania del Norte-Westfalia y es profesor de historia de la ley en la universidad Humboldt, Berlin, desde enero de 2006.
Su carrera como escritor comenzó con novelas policíacas teniendo como protagonistas a un personaje llamado Selbst (Juego de palabras con Yo Mismo); su primera novela se llamó Auto-castigo. Otra de sus novelas, El nudo gordiano, ganó el premio Glauser en 1989. En 1995 publicó el Lector (der Vorleser), una novela parcialmente autobiográfica . El libro se convirtió en un éxito de ventas en Alemania y fue traducido a 39 idiomas. La primera edición españaola apareció en 1997. Ganó el premio Hans Fallada, el premio Welt, el premio Italiano Grinzane Cavour, el premio francés Laure Bataillon y el premio Ehrengabe de Düsseldorf Heinrich Heine Society. En el año 2000 publicó una colección de cuentos titulada Amores en fuga.
En 2008 el director británico Stephen Daldry realizó una adaptación al cine de El Lector.


II) RESUMEN DE LA NOVELA:

Es la historia de amor entre un niño de quince años y una mujer mayor que él. Una mujer extraña que ama y se deja amar por el joven, el cual tiene que leer siempre antes de amarse.
Un día Hanna, que así se llama la mujer, desaparece súbitamente de la vida del niño.
Después de algún tiempo el joven, que estudia Derecho, en un juicio, se encuentra con la mujer amada. Hanna está acusada de crímenes cometidos en los campos de concentración. Fue guardiana de las S.S.
Siguiendo el proceso acusatorio el joven, se enfrenta con los sentimientos pasados y la realidad actual.
Durante el juicio el autor desvela el gran secreto de Hanna, no sabe leer.
Esta mujer prefiere ser acusada y castigada antes que desvelar su gran secreto. El final de Hanna, en prisión, es el reencuentro con Michael y el suicidio.

III) TEMA DE LA NOVELA:

Es una historia de amor y seducción, de culpabilidad y contradicciones a través del tiempo y de la lectura.

IV) ESTRUCTURA DE LA NOVELA:

El autor nos presenta su obra en tres partes bien diferenciadas:

1ª Parte: El autor nos relata el inicio y primeros tiempos de la relación entre la mujer y el joven, hasta que un día ésta desaparece de la vida del adolescente.

2ª Parte: El reencuentro unos años después, durante los juicios contra los criminales nazis.

3ª Parte: De nuevo, dos décadas después, vuelven a encontrarse.




El autor nos presenta de manera minuciosa y detallada esta historia de amor ya que utiliza un gran número de adjetivos.
Todo el desarrollo de la obra está narrado de forma retrospectiva y en primera persona por el personaje principal masculino.


V) ESTUDIO DE LOS PERSONAJES:

HANNA: Es una mujer extraña, fría, entrañable, valiente y cobarde al mismo tiempo. En algunos aspectos de su vida, entrañable porque es capaz de amar con intensidad a una persona mucho más joven que ella, casi un niño.
Valiente porque posee el suficiente coraje para convivir al mismo tiempo con su Hanna despiadada y fría y con su Hanna entrañable
También se puede considerar cobarde porque no se enfrenta a los sucesos de su vida y rehuye de ellos.

MICHAEL: Es una adolescente inseguro que va madurando a medida que avanza en su relación con Hanna y que es capaz de superar los momentos de incertidumbre y complejidad que aparecen durante la relación que mantiene con una persona adulta, y que marcará toda su vida en cuanto a la relación con las mujeres y en cuanto al cambio de rumbo de su profesión.


VI) ASPECTOS A DESTACAR:

La limpieza es una obsesión que se observa a lo largo de la primera parte de la novela :( cap.3 pag.15), (cap.6 pag.27), (cap.8 pag.35).
- el olor a lejía de la casa de Hanna
- la ducha que Hanna le daba al joven antes de hacer el amor. Esta necesidad/obsesión por la limpieza puede estar relacionada con los trabajos que realiza Hanna y su sentido culpabilidad. Es una manera de sentirse bien y creer que sus malos actos son depurados, es una manera de depurar el personaje.
La valentía y/o la cobardía: En la vida de cualquier persona, y en particular en la de Hanna, existen muchos aspectos. La valentía o la cobardía son términos subjetivos, ya que como por ejemplo en el caso de la protagonista el hecho de vivir su secreto con el coraje que lo hace puede considerarse valentía, por otra parte el no haber aprendido a leer y no enfrentarse a sus problemas, huyendo constantemente puede considerarse como cobardía .
¿Una persona tiene el deber de desvelar un secreto que afecta a otra persona (para ayudarla)?
¿O debe callar y respetar la decisión de la persona afectada aceptando las consecuencias?
Esta es una pregunta difícil de responder. Nos encontramos frente a un dilema, entramos en contradicción con determinados valores que las personas poseemos y que nos vienen dados por la educación que cada persona recibe, como por ejemplo : la ética , la honestidad, la sensibilidad, la capacidad de análisis etc....
La justicia, Michael se debate entre los recuerdos y la necesidad de justicia. ¿Como es posible haber amado a alguien que es acusada de algo tan cruel? ¿Que puede más el amor o la vergüenza de la culpa? Pag 160: “mi sufrimiento por haber amado a Hanna fue de algún modo el paradigma de lo que le pasaba a mi generación, de lo que le pasaba a los alemanes”







VII) ¿POR QUE LEER EL LECTOR?

Es una novela preciosa , porque cuenta una historia amorosa entrañable y compleja.
Los sentimientos narrados se desvelan auténticos, así como el paisaje y los cambios que a través del tiempo se producen en él.
Desde el principio de la historia se va deduciendo un gran POR QUÉ.
Por qué una señora mantiene una relación tan especial con un adolescente .
Por qué el baño antes de amarse.
Por qué siempre el joven tiene que leer en voz alta .....
Es un amor que condiciona para siempre la vida del personaje masculino y hace insustituible al personaje femenino.
Continúan durante toda la vida, fuertemente ligados el uno al otro.
Michael vislumbra en las arrugas de Hanna, todo lo que ha amado y odiado.
Mientras que ella,sigue viéndolo como un niño, aquel que conoció hace tanto tiempo.
El secreto de Hanna, su revelación y la relación que mantienen, sus dos personajes principales, hasta el final de la historia, hace que esta novela sea sorprendente, diferente y bastante agradable de leer.

viernes, 15 de enero de 2010

Gener 2010


Estimades amigues: Com sabeu en el mes d’octubre ferem la presentació del llibre “La Paz es nuestra” quedá pendent la visita guiada per la València Repúblicana ,amb un circuit femení per el carrer de la Pau i voltants, espais que van ser il.luminats per la dona . Destàcarem algunes de les protagonistes d’eixa època de lluita i de somnis per la cultura, la llibertat i la igualtat de gènere, afegint noms d’un infinit d’esperiències.Sentirem música revolucionaria .

Disposarem de un dossier i tendrem temps per a descansar.

La visita será guiada per Cristina Escrivá, autora del llibre.

Diumentge 14 de Febrer, eixida a les 9h. des de l’estació del metro de Paiporta per iniciar el circuit a les 9’45h des de la parada Plaça Pintor Pinazo.

Preu socies 8€ places limitades a 25 persones.
Preu No socies 10€

Reserva als telèfons: Maruja 645668308 i Reme 963975243
Avans del dia 11

Esperem la vostra assistència


DONES PAIPORTA